La orientación y guía tiene como objetivo desarrollar de manera paulatina la autonomía progresiva, para ello el docente debe favorecer, acompañar, conducir y potenciar la autonomía de sus estudiantes en las diversas situaciones de la vida cotidiana según sus etapas de desarrollo y sus objetivos propuestos. Orientar y guiar dicen relación con poner a disposición del niño, niña o adolescente aquellas condiciones físicas, materiales y de equipamiento que estimulen su deseo y posibilidad de autonomía.
Para lo anterior es importante que el docente pueda monitorear, guiar u orientar de cerca los intentos, esfuerzos, errores y aciertos que el niño o niña pueda dar en sus experiencias de aprendizaje y en un contexto de buen trato utilizar esas experiencias para el aprendizaje, reforzando positivamente cada intento, cada paso, por muy mínimo que sea, con el fin de que el estudiante pueda lograr su máximo desarrollo y autonomía.